miércoles, 16 de enero de 2008

Rabietas populares (II)

Se comenta que, en las declaraciones que Gallardón ha realizado tras la reunión de ayer, se puede leer entrelíneas que abandonará la política porque está tremendamente decepcionado (él mismo ha usado la palabra 'derrotado').

Yo no sé si hará mutis por el foro o no (yo creo que es todo por el espectáculo); pero lo que parece claro es que se ha dado una gestión interna nefasta. Primero, porque estas cosas tan trascendentes se planean antes. Segundo, porque se hace de puertas para adentro, sin dar de qué hablar cuando no hace falta. Y tercero, porque Gallardón ya no puede ir de legal ni de víctima tras...sacrificar el puesto que el pueblo le ha confiado en las urnas. ¿Para que rogó entonces por sus votos, para abandonar cuando las cosas no le gustan? Puedo entender su malestar, pero la responsabilidad va con el cargo. Y si aun con todo se va, ¿él mismo elegirá su sustituto a dedo? Parece un poco injusto quedando tres años y medio por delante...

A veces uno se alegra de que pasen este tipo de cosas para ver realmente de qué pie cojea cada uno. Porque como dije ayer, "el que no sabe manejar su propia vida, ¿cómo va a manejar un Estado?". Y que conste que esto va por los tres mosqueteros: Rajoy, Gallardón y Aguirre. Uno contra todos, y todos contra uno. O todos contra todos, visto lo visto.

No hay comentarios: