AVErías

"Tocado y hundido", dice 'La Gaceta de los Negocios' respecto al AVE a Barcelona. Tanto como hundido no (algún que otro socavón, nada más), pero tocado... bastante tocado sí que está. En Cantabria, no hay día que el amigo Revilla (amigo por decir algo) no clame por su Tren de Alta Velocidad, aunque viendo como están las cosas, lo mejor sería pedir "que aquí no lo traigan, por favor!".

Parece que el único AVE bueno que hay en España es el que comunica Madrid con Sevilla. El AVE que quiere ir a Barcelona no sólo se está complicando cada vez más, sino que tiene planeadas no-sé-cuantas paradas en el trayecto. ¿Pero no es un tren de alta velocidad? ¿Entonces por qué para más que el autobús regional?

Para el AVE que con destino a Valencia...se está construyendo un puente que obstruye parte del cauce del Turia, y eso que los ecologistas ya han avisado de que los riesgos de inundación son importantes. El que va a Valladolid no tiene puentes, todo lo contrario, tiene un par de pasos a nivel. Así que esto va a ser como los semáforos en el colegio. Hasta que no se inunde la zona metropolitana de Valencia o hasta que un AVE vallisoletano se lleve por delante un par de coches, no se pondrán remedios. Y al final tendremos que agradecer que se molesten en poner parches a lo que han hecho mal cuando lo exigible es que las cosas se hubieran hecho bien desde un principio.

Ahora muchos piden destituciones y responsabilidades. Otra vez confundiendo el orden de las cosas. ¿No será mejor calmarse, pensar cómo arreglar el Cristo que se ha montado y luego ya veremos? Porque en Barcelona aún queda por empezar el tramo de la Sagrada Familia, y espero que no deba caerse el edificio para darnos cuenta de lo cabezones que somos por este país.